Las recientes lluvias en Ecuador han traído un alivio significativo a la crisis eléctrica del país. Las condiciones de generación hidroeléctrica han mejorado notablemente, garantizando la provisión de energía durante el feriado de Año Nuevo y, potencialmente, hasta la segunda semana de enero.
Una de las principales hidroeléctricas beneficiadas es Coca Codo Sinclair, ubicada en el río Coca. En diciembre, esta planta ha producido un promedio de 703 megavatios diarios, el doble de lo que generaba hace dos meses, aunque aún está lejos de su capacidad instalada de 1,500 megavatios.
Mejoras en el Complejo Paute
Las hidroeléctricas del complejo Paute, que incluye Mazar, Molino y Sopladora, también han visto mejoras significativas. El embalse de Mazar, crucial para estas plantas, ha superado los 2,124 metros sobre el nivel del mar, acumulando 14 metros adicionales en los últimos 27 días gracias a las lluvias en Azuay y Cañar.
Perspectivas Climáticas y Desafíos Futuros
Las perspectivas climáticas indican que las lluvias continuarán al menos hasta la segunda semana de enero, lo que debería seguir beneficiando la generación hidroeléctrica. Sin embargo, persisten desafíos en la infraestructura y el mantenimiento del sector eléctrico ecuatoriano, lo que podría afectar la confiabilidad del suministro a largo plazo.
En resumen, las lluvias recientes han mejorado significativamente la capacidad de generación hidroeléctrica en Ecuador, proporcionando un respiro a la crisis eléctrica y garantizando la provisión de energía a corto plazo. No obstante, es crucial abordar las limitaciones de infraestructura y mantenimiento para asegurar un suministro constante y confiable en el futuro.
Fuente:
Ecuador